Orando desde dentro: Un encuentro en la distancia

0 Comentario
881 Vistas
“Clama a mí, y yo te responderé,
y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces” (Jer 33, 3).

Esta Semana Santa ha sido, sin duda, algo novedoso y puedo decir que hasta maravilloso en todo el sentido de la palabra. Pertenezco al grupo de jóvenes “Guerreros de Cristo”, de la parroquia Santa Rita de Casia, ubicada en Nuevo Laredo, Tamaulipas (México). Cada año que nos ha tocado vivir el tiempo de Pascua, nos organizamos y vamos de misiones a aquellas colonias que están al poniente de la ciudad y no tienen la posibilidad de asistir a la parroquia, debido a que están demasiado retiradas.

Este año no iba a ser la excepción, puesto que se estaba elaborando el plan de trabajo. Sin embargo, las circunstancias no nos favorecieron y estuvimos en cuarentena. Por tal motivo nuestras reuniones quedaron suspendidas. Pero bien dicen que nunca hay que subestimar a los jóvenes, puesto que de ellos vendrán las mejores ideas. A mediados del mes de marzo, se propuso la idea de poner de nuevo en funcionamiento una página de Facebook, que hace aproximadamente dos años que no utilizábamos. La idea fue aceptada por varios miembros del grupo, sin embargo debido a que en ese momento también se dieron las clases en línea, algunos jóvenes no contaban con el tiempo para apoyar en la actividad. No era sino Johan, Elva y Martín (miembros del grupo), quienes se dedicaban a plasmar en la página ciertas reflexiones, oraciones, sobre los momentos de la cuaresma junto con una imagen referente, para hacerle saber a las personas que la iglesia somos todos y que nunca está cerrada.

Al principio teníamos dudas, debido a que no teníamos muchos seguidores y queríamos que la Palabra de Dios llegara a todo el mundo, así que, con la ayuda de un patrocinador, promocionamos las primeras dos publicaciones y vaya que la respuesta de las personas fue positiva, ya que llegamos a alcanzar hasta 1.000 personas en tan sólo un día. Posteriormente se fueron haciendo más publicaciones y había más interacción con las personas.

Al iniciar con la Semana Santa, se reunieron más jóvenes, como Emily, Mayra, Rubí, Laiza, Ángel, Rodolfo, David, Iris, Miguel y la Hna. Sara González, quienes apoyaron para la realización de un collage que decía “Quédate en casa, Cristo vive y te quiere vivo”, en el cual los usuarios empezaron a compartir y llegábamos a más personas. Como ya teníamos el material para trabajar la Semana Santa, el cual se nos había proporcionado gracias a las Hijas de San José, hicimos diversos videos en el que se mostrara cada estación, pero no era dramatización, sino que hacíamos mención de las causas que aquejaban a nuestra sociedad, como la delincuencia, la falta de trabajo, las enfermedades, el cuidado de la naturaleza, la violencia contra la mujer, etc., todo enfocado a revalorizar lo que Jesús padeció por nosotros.

En resumen, puedo decir que esta experiencia nos marcó, puesto que vivimos algo novedoso, preparamos nuestro corazón para la llegada del Señor; cada uno desde su interior ofreció a Jesús los dones que nos dio para hacer saber al mundo que sigue vivo y que todos los días camina con nosotros, puesto que no había que olvidar, que no sólo es cuarentena, sino cuaresma.                                              

 Martín Dagoberto Soto Guevara, Reservas Territoriales (México)