Te doy gracias y te bendigo por el don de la vocación josefino
Con gran alegría vengo hoy a hablaros de mi Primera Profesión, que tuvo lugar el 14 de agosto de 2023 en la parroquia de San Mateo.
Antes de la profesión, hice un día de retiro para prepararme mejor. El retiro se centró en la frase que elegí para mi profesión: «Si el grano de trigo cae en tierra y no muere, queda solo; si muere, da mucho fruto» y también en la llamada que me hizo Jesús de Nazaret. Mientras yo hacía el retiro, todas las hermanas, todas mis compañeras, estaban ocupadas a decorar la casa, en preparar lo que íbamos a comer y beber ese día. También fueron a limpiar la iglesia, donde iba a tener lugar la celebración, y les ayudaron algunos jóvenes de la parroquia.
El día 14, día de mi profesión, me despertó toda la comunidad cantándome las «mañanitas», fue muy
bonito y yo rebosaba de alegría. A la hora de la profesión, es decir, a las 3 de la tarde, comenzó la celebración, presidida por el Padre Bitemo SJ.
El coro estaba formado por varios jóvenes de la parroquia y cantaron muy bien. Durante la celebración, la procesión del Evangelio fue llevada a cabo por algunos niños del grupo Nazaret, acompañados por otros jóvenes del movimiento de la Encarnación. Estuvieron presentes en la celebración la Madre General, la Hna. María Pilar, todas las hermanas y las jóvenes en formación de la comunidad de Douala. Los miembros de los Talleres y los niños del grupo Nazaret, mi familia, amigos, religiosas y religiosos de otras Congregaciones y muchas otras personas. Doy gracias a Dios por este día en el que aceptó consagrarme a Él. Agradezco a toda la Congregación por acogerme en su seno.
También quiero agradecer a todas las hermanas que me acompañaron con sus ora-ciones desde donde estuvieran. También me gustaría dar las gracias a todas las herma-nas y laicos de los Talleres por haberme felicitado y animado ese día a través de las lla-madas y mensajes que recibí de ellos. Mi alegría es inmensa y quiero expresaros mi gratitud a todos y todas. Gracias por vuestras oraciones, me encomiendo a vosotros una vez más; rezad por mí, que el Señor me ayude a ser una buena Hija de San José.
Que Cristo sea alabado y venerado en el trabajo.
Fabiola Laeticia KAMGA FSJ