Hagamos un proyecto de grupo

¿Qué es un Proyecto de grupo?

Es una ayuda para que nuestros deseos y expectativas no se queden en el aire, sino que se vayan convirtiendo en una realidad.

Un Proyecto de grupo es como un camino, en el que se van trazando pequeñas metas, en el que hay pasos que dar, razones y motivaciones que nos llevan a seguir avanzando, a pesar de los obstáculos. Nos abre a paisajes nuevos, a un horizonte que ilusiona y ensancha el corazón. Esa es la actitud: nos ponemos a proyectar porque tenemos un horizonte de deseos sinceros y auténticos, que nos llevan a aportar lo mejor de nosotros mismos.

Pero, además, uno de los aspectos especialmente significativos de un Proyecto de grupo es que precisamente el grupo: el hecho de que sean metas, pasos, esfuerzos y acciones compartidas. Como hermanos nos modelamos en el camino.

Y en el camino, siempre encontraremos al Señor. Tal vez no lo descubramos al principio, como les ocurrió a los discípulos de Emaús (Lc 24, 13-34). Pero ahí está, animándonos siempre.

¿Cómo hacerlo?

Primero vamos a preguntarnos por la realidad de nuestro grupo:

  • ¿Qué aspectos positivos descubrimos en nuestro grupo?
  • ¿Qué problemas tenemos?
  • ¿En qué nos gustaría crecer?

El siguiente paso es formular OBJETIVOS, es decir, vamos a expresar deseos: ¿qué queremos lograr en este tiempo?

  • En la dimensión humana.
  • En la dimensión cristiana.
  • En cuanto al compromiso social o laboral.
  • En conocimiento del Carisma y sentido de pertenencia a la Familia Josefina.

Por último, pensamos y consensuamos algunas ACTIVIDADES y ACTITUDES que nos ayuden a caminar hacia esos objetivos. Esas actitudes tienen que ser concretas, es decir, decidir cuándo y cómo las haremos, quién será responsable de llevarlas a cabo (si todo el grupo o alguna persona) y qué recursos necesitamos para llevarlos a cabo (medios materiales, textos, etc.)

Cuando terminemos nuestro Proyecto, decidimos en qué momento queremos evaluarlo. Sólo con la evaluación, el Proyecto se convierte en algo dinámico, en un verdadero motor del camino.
¿Se animan??? ¡¡Ánimo y adelante!!

Por último, para confirmar todo lo dicho, o quizás para motivar desde el principio la realización del proyecto, miren el siguiente vídeo. ¿Qué les sugiere?

El arbol indio, (o la fuerza de un niño)avi