Súmate al Comercio Justo

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Hola, de nuevo, estoy con vosotras. Si recordáis en el Boletín de mayo os compartía las actividades que habíamos llevado a cabo con motivo de la Fiesta del Día Mundial del Comercio Justo. Pero una actividad quedaba pendiente de realizar, era para el día 19 de mayo en la escuela «Bora Gran» de Serinyà, pueblito pequeño a 8 ó 9 km de Bañolas. Ese día fuimos Alex -voluntario de la tienda- y yo a dicha escuela, en el horario de tarde, y presentamos a los cursos, de 4º a 6º de Primaria, el Comercio Justo. La acogida por parte de los profesores fue muy buena, cercana y sencilla, así como del personal de servicios. Observamos que es una escuela con profesores jóvenes y se percibe un ambiente con buena organización.

Comenzamos por el curso de sexto -19 chicos- y, más tarde, con 4º y 5º que eran 22. Después de presentarnos, proyectamos el vídeo «Súmate al comercio justo», enviado por la Coordinadora Estatal de C.J. en el que se veía muy bien, con imágenes muy expresivas y actuales, cómo funciona el comercio tradicional mundial, controlado por los países más ricos y las multinacionales, que buscan los máximos beneficios explotando a los pequeños productores y sin respetar el medio ambiente; y cómo el comercio justo es una alternativa a este tipo de comercio, donde se tiene en cuenta a la persona campesina o productora, para que pueda vivir dignamente de su trabajo, respetando el medio ambiente.

Abrimos luego un diálogo sobre lo que habían visto. Os comparto que las intervenciones de los chicos fueron muy valiosas y acertadas y, desde ahí, les íbamos explicando el funcionamiento del Comercio Justo. Les hablamos de las cooperativas, muchas de ellas dirigidas por mujeres, de las importadoras, de los productos que se venden en una tienda, de dónde vienen dichos productos, de los voluntarios… y Alex aprovechó para compartir su experiencia gratificante de voluntario en la tienda.

Hicimos mucha fuerza en que el movimiento internacional del comercio justo se rige por un documento esencial que deben cumplir todas las organizaciones, que es la Carta de los 10 Principios – ya os los pusimos en el escrito de mayo-. Repartimos a cada uno de los chicos el folleto de los Principios y ellos mismos fueron leyéndolos y aportando lo que entendían, completando Alex algún aspecto de cada principio.

Queremos resaltar el comportamiento de los dos grupos que estuvieron muy atentos al vídeo, captando perfectamente el contenido, pidiendo el turno para hablar y muy interesados haciéndonos preguntas; en ningún momento hubo que llamarles la atención. Nos hicieron fotos con los chicos de ambos grupos, y nos regalaron una maceta de lavanda y un miniposter con las fotos, donde nos daban las gracias por ayudarles a entender que el mundo ha de ser más justo. Para mí fue una gozada volver a la escuela y encontrarme en medio de los chicos como pez en el agua. Es una alegría poder sensibilizar y transmitir a las nuevas generaciones que otro mundo mejor, más solidario, justo y ético para todos, es posible a través del Comercio Justo. Y en esas estamos y seguiremos caminando….


Marisa Muñoz f.s.j.

“Ojalá que algún día no sea necesario el comercio justo porque todo el comercio ya sea justo”. Palabras de un niño de 11 años de la escuela Bora Gran de Serinyà (Girona).

Hace unos días acompañé a la hermana Marisa Muñoz a esa escuela para dar una pequeña charla sobre el Comercio Justo a niños/as de 4º a 6º de Primaria. Fue una experiencia muy gratificante para mí por tres motivos:

  • Por poder transmitir un mensaje de justicia y solidaridad a niños/as de corta edad.
  • Por constatar el nivel de conciencia y reflexión que manifestaron en algunas de sus intervenciones.
  • Y, finalmente y a nivel personal, por encontrarme en un aula, después de bastantes años de profesor jubilado, en un ejercicio de enseñar y aprender.

Además de esta experiencia puntual, quiero expresar mi satisfacción después de bastantes años como voluntario en la tienda de Comercio Justo de Can Butinyà de Banyoles. Aunque mi aportación es muy reducida, la recompensa no tiene precio. Puedo decir que recibo el “ciento por uno” en atención y cariño de las hermanas y en satisfacción personal por colaborar, aunque mínimamente, en la construcción de un mundo en el que las relaciones comerciales sean justas y respetuosas con los derechos de la personas y de nuestra Madre Tierra.

Álex García


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