María

María, mujer de la escucha, abre nuestros oídos;
haz que sepamos escuchar la Palabra de tu Hijo Jesús
entre las mil palabras de este mundo;
haz que sepamos escuchar la realidad en la que vivimos,
cada persona que encontramos,
especialmente aquella que es pobre, necesitada, en dificultad.

María, mujer de la decisión,
ilumina nuestra mente y nuestro corazón,
para que sepamos obedecer a la Palabra de tu Hijo Jesús, sin titubeos;
danos el coraje de la decisión,
de no dejarnos arrastrar para que otros orienten nuestra vida.

María, mujer de la acción,
haz que nuestras manos y nuestros pies
se muevan “sin demora” hacia los otros,
para llevar la caridad y el amor de tu Hijo Jesús,
para llevar al mundo, como tú, la luz del Evangelio. Amén.

 

Papa Francisco